EL FMI QUIERE MAS PRIVATIZACIONES
Tomás Oropeza
Corresponsal
México, 1 de diciembre.- A medio año de que se realicen las elecciones federales del 2006 y a un cuarto de siglo de que el Fondo Monetario Internacional le impusiera al país un modelo económico que ha producido millones de pobres y desempleo, ese organismo ha comenzado a presionar para que se acelere la realización de reformas privatizadoras que el pueblo mexicano ha rechazado.
Al parecer la intención es forzar a una definición complaciente a los tres principales aspirantes a la presidencia.
Conciente de la debilidad y desarticulación que existe en el movimiento popular mexicano por estos meses, el Consejo Ejecutivo del FMI expresó su impaciencia y "decepción" por la demora y lentitud con la que se aplican su recetario neoliberal en México.
En coincidencia con las pretensiones de varios organismos empresariales como la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) criticó el atraso en la aplicación de reformas económicas, como las de los sectores de telecomunicaciones y energía.
La cúpula del organismo financiero imperialista integrada por los directores ejecutivos que representan a los 184 países miembros del organismo, manifestaron en un comunicado que suena a ultimátum su "decepción por el bajo ritmo (en la aplicación) de las reformas estructurales, a pesar del compromiso de las autoridades (mexicanas) para avanzar en este área".

Aunque debido a la obediente aplicación de la política de apertura comercial y privatizaciones el país tiene más de 75 millones de pobres y ha visto crecer la migración hacia Estados Unidos donde ya viven unos 24 millones de mexicanos, los directivos del FMI destacaron que para hacer frente a los "desafíos" en términos de competitividad, productividad y crecimiento de México, "serán indispensables reformas estructurales más profundas".

Además del petróleo y la electricidad reclaman la privatización de las telecomunicaciones, reformar la Ley Federal del Trabajo, el sistema judicial, del sistema tributario y del entorno regulador y de negocios.

En el documento que falta al respeto de la soberanía nacional, se sostienen que el Consejo Ejecutivo está "animado” porque según su visión “existe una conciencia popular creciente de la necesidad de implementar una agenda de reformas estructurales ambiciosas".

Olvidando que en 1994 de produjo una rebelión indígena contra la política neoliberal, encabezada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y que un sector de los movimientos sociales y organismos de izquierda están construyendo un movimiento anticapitalista los directores ejecutivos aconsejaron a las autoridades mexicanas "a seguir listas para avanzar rápidamente en la implementación de estas reformas en el momento apropiado".

Estas recomendaciones son parte de la revisión de la economía mexicana, conocida como "Artículo IV", que realiza el FMI periódicamente.
En su comunicado alerta de la dependencia del Gobierno de México de los ingresos por la explotación de crudo. "Un cambio en los precios del petróleo podría complicar la política fiscal si los gastos no pueden ser reducidos rápidamente", advierte.