miércoles, noviembre 09, 2005

SECRETARIA DE GOBERNACIÓN NIEGA AUTENTICIDAD DE REGLAMENTO DE CORTE FASCISTA
Tomás Oropeza
Corresponsal
México, 9 de noviembre.- Ante la incipiente reacción de repudio al reglamento de la Ley de Seguridad Nacional (LSN), que impondría un régimen de estricta vigilancia y violación de las garantías individuales de los empleados públicos - y en general del pueblo mexicano- , por parte del Centro Nacional de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), el secretario de Gobernación Carlos Abascal Carranza, declaró que la versión sobre el reglamento difundida por el diario La Jornada es “apócrifa”y que el verdadero reglamento aún se halla en proceso.
El retroceso de Abascal Carranza se produce tres días después de que el reportero de ese matutino, Gustavo Castillo, diera a conocer que en breve se publicaría en el Diario Oficial un reglamento de la LSN que legalizaría una serie de medidas de corte fascista para vigilar, someter al detector de mentiras, e incluso “chantajear” a los empleados de la federación sospechosos de realizar alguna actividad que -según el criterio de los encargados de la seguridad nacional- ponga en riesgo la seguridad del Estado.
Y es que hasta los legisladores de Acción Nacional (PAN) al que pertenece Abascal, han declarado que se opondrían a que el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) se convierta "en una policía política, en un órgano de persecución que genere terror y limite las libertades protegidas por la Constitución", porque sería regresar a las épocas de la Dirección Federal de Seguridad (DFS).
La noticia dada a conocer con oportunidad parece estar deteniendo la pretensión del ex secretario de Trabajo y ahora responsable de la seguridad interna, por hacerse de una posición privilegiada para controlar los hilos de la política del país, en momentos en que las interminables torpezas del presidente blanquiazul Vicente Fox y la corrupción que campea en Los Pinos, han vuelto casi imposible el triunfo electoral en las elecciones del 2006.
Abascal, quien siendo titular de la secretaría de Trabajo se ganó el mote de Monseñor, por sus reiterados discursos de tintes religiosos ante los obreros, pretendía convertirse en una especie eminencia de los servicios de espionaje, mediante la imposición del reglamento que estuvo encriptado y se tendría que publicar en esta misma semana en el Diario Oficial con el mayor sigilo.
Según los especialistas el reglamento distorsiona el objetivo de la Ley de Seguridad Nacional que busca crear un equilibrio de fuerzas entre los diversos órganos de inteligencia del Estado, tanto civiles como militares, con la creación de un consejo nacional y la figura de un secretario técnico que en los hechos fungiera como asesor presidencial en la materia.
Sin embargo, el proyecto de reglamento respectivo, lejos de fortalecer al órgano colegiado, lo supedita al secretario de Gobernación en su calidad de secretario ejecutivo del mismo, apoyado en las acciones que desarrolla el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen).
Por ahora la publicación de un documento ultrasecreto, filtrado a la prensa desde las instituciones que conforman el Consejo de Seguridad Nacional (secretarías de Gobernación, Defensa Nacional, Marina, PGR y Seguridad Pública Federal) ha encendido los focos rojos para la alerta de la sociedad mexicana que no está dispuesta a permitir que la pandilla que mal gobierna al país la lleve a los tenebrosos tiempos en que la Dirección Federal de Seguridad de Fernando Gutiérrez Barrios (DFS) y Brigada Blanca comandada por el torturador Miguel Nasar Haro, aterrorizaban al país para defender a los regímenes del PRI-Gobierno.

No hay comentarios.: